sábado, 22 de agosto de 2015

Literatura - Crítica y Reflexión de Todo lo que era sólido

Muy buenas a todos, hoy vengo a hablaros de un magnífico libro que me leí hace poco, se llama "Todo lo que era sólido", y está escrito por Antonio Muñoz Molina. Este señor es académico de la RAE, premio Príncipe de Asturias de las letras y para mí es también uno de los mejores columnistas de El País.

Una vez presentado el autor, voy a hablaros de mi experiencia con su libro, "Todo lo que era sólido" es un ensayo sobre la sociedad española, que nos muestra cómo ese reino idílico que creíamos que era la España de los 2000 se vio truncada por la llegada de la crisis. Para explicarnos la caída de ese sueño en el que vivíamos Antonio Muñoz Molina nos desgrana el comportamiento que ha tenido la sociedad española en los últimos cuarenta años, desgrane que versa sobre temas como la educación, los valores, la economía, los nacionalismos o la religión, es decir, "Todo lo que era sólido" no es un ensayo sobre un tema en concreto, sino un ensayo que versa sobre cómo entender nuestra vida dentro de una sociedad tan plural como lo es la española.



Tras leer este libro me dí cuenta de cómo las generaciones que en teoría tendrían que haber velado por el mantenimiento y la mejora de nuestro sistema, se convirtieron en una seria de vigilantes dormidos, vigilantes que no se despertaron hasta que fue demasiado tarde; unos vigilantes que, aun a pesar de haber conseguido la democracia, durante la transición decidieron mirar inconscientemente hacia otro lado mientras ese sistema que tanto había costado conseguir se iba poco a poco desmoronando aun a pesar de los "buenos resultados" a nivel económico.

Otra de las cosas que he sacado en claro gracias a este libro es la necesidad de cambiar la manera de hacer política, y no hablo de que haya que quitar a los viejos para poner a los nuevos (que también), sino de que tenemos que abandonar este clima de confrontación constante para empezar a cooperar; porque no nos olvidemos de que los países son realidades plurales, por lo que en ellos hay diferentes ideologías y todas ellas merecen respeto (salvo las extremistas), es decir, ¿no sería más productivo juntarnos y trabajar en lo que nos une que estar siempre sembrando diferencias entre nosotros?

La forma de hacer política es un claro reflejo de la sociedad, ya que no nos olvidemos que los representantes no salen elegidos por arte de magia, por lo que los ciudadanos debemos de aceptar una parte de la culpa.

Reflexiones de este tipo que he ido haciendo a lo largo del libro me han parecido tremendamente útiles, en especial, las que versaban sobre el cambio de mentalidad sufrido en España tras la transición y las que trataban sobre los diferentes nacionalismos y sus causas.

A modo de conclusión me hago una pregunta, ¿será mi generación (la de los 90) capaz de solidificar todo lo que se ha desvanecido tanto en España como en Europa?, o ¿volveremos a cometer los errores de generaciones pasadas (algo muy común en el ser humano)? A esta pregunta suelo responder con el concepto que acuñó Machado de "las dos Españas", es decir, una que progresa y tira del carro mientras la otra se mantiene estoica en una posición político/social ya obsoleta; aunque he de decir que yo tengo esperanza en el potencial de este país y creo que la primera España acabará derrotando a la segunda.



Perdonad por la parrafada, pero creo que este libro la merecía, no sè si alguien habrá llegado a leer hasta aquí XD, pero si lo has hecho espero que te haya sido de utilidad y solo me queda recomendarte este libro, ya que el autor se aleja de las trincheras políticas para ofrecernos un punto de vista bastante objetivo, y eso por desgracia es algo poco frecuente. Un saludo a todos.





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